Antes de comenzar una empresa o
negocio, conviene tener en cuenta ciertas barreras de entrada y
salida con las que se va a tener que lidiar.
Estas barreras ocurren principalmente
en la competencia imperfecta, en los oligopolios, la competencia
monopolística, y en mayor medida en los monopolios, mientras que en
la competencia perfecta, en teoría, son inexistentes.
Barreras de entrada:
Las barreras de entrada son los
obstáculos o dificultades que una empresa debe afrontar para empezar
a formar parte del mercado. Según el sector, pueden darse distintas
barreras, por ejemplo, abrir una cafetería no requiere tantos costes
y dificultades como abrir un hipermercado.
Estas barreras pueden ser de carácter
económico, social, o legal, y además se dividen en dos tipos
principales, las barreras absolutas y las relativas:
- Barreras absolutas: Son las que niegan casi completamente la entrada de una nueva firma al mercado. Estas barreras casi imposibles de superar, ya que requieren una licencia para poder comenzar. Por ejemplo, las cadenas de televisión nacionales, las farmacias, etc.
- Barreras relativas: Son las que complican la entrada al mercado, pero no lo niegan por completo, y estas barreras son superables. Se clasifican en:
-Economía de escala:
Obliga al que
quiere producir a hacerlo a gran escala, poniendo una gran inversión,
o entrar en pequeña escala y asumir las desventajas en costes.
-Diferenciación del producto:
Las
empresas ya establecidas tienen prestigio de marca, y una clientela
leal. También patentan sus productos, evitando los plagios de otras
empresas.
-Necesidades de capital:
Abrir un
negocio requiere enormes gastos, en especial para la producción y
las campañas publicitarias, necesarias para captar la atención de
clientes.
-Barreras de carácter legal:
El
gobierno tiene el poder de limitar o impedir la entrada de nuevas
compañías por medio de licencias, normas de anticontaminación,
entre otras.
-Empresas establecidas:
Las grandes
compañías conocidas e importantes entorpecen a las compañías
locales, debido a su mayor experiencia, una mejor localización, y su
fama.
Barreras de salida:
-Costes económicos:
Son aquellos
costes que el empresario debe asumir si desea cerrar su comercio.
Entre estos costes se encuentran las indemnizaciones a los empleados
despedidos, o verse obligado a rebajar los precios, en liquidaciones
u ofertas, para agotar todas las existencias.
Los trabajadores despedidos podrían organizar
huelgas y manifestaciones para intentar evitar el cierre. En el
aspecto gubernamental, no es tan sencillo para una compañía
cancelar los contratos fijos de sus trabajadores, podría tener una
repercusión económica sobre la región y la nación, y supondría
una falta de producción de ese bien o servicio en el país.
-Barreras de salida estratégica: Algunas compañías deciden reducir la cantidad de sus productos,
reduciendo sus gastos, y así evitando su hundimiento.
Fuentes:
Irene Astilleros de Dios y Ana Cazallas Velasco de 1ºB.
No hay comentarios:
Publicar un comentario